Hay heridas que vuelven a abrirse...
Cuando remendaste con lágrimas las mentiras, vueles a empezar, pero te traicionan mil veces más.
Cuando se pone confianza en un frasco roto y ésta se vuelve a filtrar.
Cuando el corazón se comprime tanto que te asfixia y suspiras para no llorar.
Cuando piensas que tu suelo es estable, pero solo es arena movediza.
Cuando se apoya tanto a alguien que te olvidas que también tienes luz propia.
Cuando te despiertas por la noche sollozando y quisieras que todo sea una pesadilla.
Cuando la ansiedad te consume, pero debes seguir con el dolor a cuestas y avanzar.
Cuando te aferraste a alguien sabiendo el daño que podía causarte.
Cuando el egoísmo del otro te muestra su verdadero rostro.
Cuando se elige la salida más fácil sin importar los daños colaterales.
Cuando las mentiras se reflejan en el rostro de quien las dice con gestos y actitudes.
Cuando la mentira y el engaño son el vocabulario perfecto.
Cuando alguien se ciega por necesidades sin notar lo que está a su alrededor.
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